La circuncisión es un procedimiento quirúrgico y mínimamente invasivo que se aplica en la urología desde los inicios de las civilizaciones judías en donde se realizaba a los recién nacidos como parte de un ritual religioso en el que se retiraba la parte del prepucio que recubre a la cabeza del pene y lo deja descubierto en todo momento; en la actualidad, el procedimiento no ha variado mucho en su realización, no obstante, sus objetivos han trascendido mucho más allá de una cuestión cultural.
La urología pediátrica en Monterrey aplica la circuncisión como parte del tratamiento de la parafimosis, balanopostitis o fimosis, enfermedad en la que el prepucio es más pequeño que el glande y no permite la función retráctil del pene; llevando a que incluso, según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 30% de los hombres del mundo están circuncidados, y de los cuales un gran porcentaje, la mitad fue por cuestiones médicas y el otro porcentaje por cultura o religión.
Desde entonces, el estudio de esta técnica ha ido en aumento y cada vez más los mejores urólogos en Monterrey estudian las aplicaciones de la circuncisión para la prevención de diversas enfermedades como lo es el cáncer de pene y una mejora en la higiene de esta zona del cuerpo, al no existir una bolsa que impida que líquidos como el agua o la orina se acumulen, generando graves infecciones.
No obstante, los estudios han llegado a develar una aplicabilidad de esta técnica en la prevención de una de las más peligrosas enfermedades en el mundo, se trata del Virus de Inmunodeficiencia Humana, o conocido popularmente como VIH, el cual, según diversos estudios desarrollados por urólogos en Monterrey y en el resto del mundo, demuestran que los hombres circuncidados tienen una menor probabilidad de contagiarse de esta enfermedad.
En esta ocasión, el Dr. David Fernández, especialista en la aplicación de la circuncisión en niños y adultos, le contará todos los argumentos de estos estudios que se han encontrado en diversas investigaciones y los fundamentos que se tienen desde la urología pediátrica en Monterrey para aplicar este procedimiento en pro de prevenir el contagio de esta enfermedad que le ha arrebatado la vida y bienestar a millones de personas.
Argumentos oficiales
Según lo expresa la OMS, si se le realizara este procedimiento a todos los varones y nacidos, se podrían evitar cerca de seis millones de casos nuevos de SIDA y la muerte de al menos tres millones de personas sólo en el África subsahariana, estas estimaciones se realizan a partir de estadísticas realizadas a lo largo del mundo, en donde se demuestra que la población sin prepucio tiene menos probabilidades de adquirir este virus.
Según los estudios, la circuncisión logra prevenir cerca del 60% del contagio, debido a que en la función retráctil del prepucio se pueden acumular sustancias en la parte baja de la cabeza del pene, lo que favorece a que el virus ingrese al cuerpo, además de favorecer a que se mantenga limpio y libre de esmegma (acumulación de células muertas) y no genera infecciones a través de las cuales se logra acumular el virus e ingresar al organismo.
No obstante, las organizaciones de salud no encuentran un consenso respecto a estos datos, ya que algunos no encuentran la circuncisión como un método preventivo para esta infección, a pesar de que el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA) y la OMS recomiendan como una prevención adicional entre los varones del África subsahariana, debido a que es una zona donde el VIH se ha propagado con mayor intensidad.
Adicionalmente, se ha demostrado que en las zonas donde la población general está circuncidada, la prevalencia del VIH es menor que en comparación con países donde no se reconoce esta práctica quirúrgica como un procedimiento común en la población, presentando de dos a tres veces más casos por cada habitante.
No obstante, aunque se demuestre que se tiene una probabilidad menor de contagio cuando se retira el prepucio, eso no quiere decir que no exista ninguna probabilidad de contagiarse, simplemente se reduce la probabilidad considerablemente, sin embargo eso no es igual a una cura certera que impida que adquiera el virus, para tener una probabilidad mucho mayor de seguridad se debe seguir las siguientes recomendaciones:
- Uso de condón.
- Regulación de parejas sexuales.
- Conocer los antecedentes sexuales de su pareja.
- Realizarse exámenes periódicos para detectar estas enfermedades a tiempo.
Estas recomendaciones, sumadas a la circuncisión, hacen menos probable el contagio pero no imposible, al menos mientras las investigaciones de una vacuna siguen avanzando.
Mientras tanto, si desea prevenir ciertas enfermedades, aumentar la higiene y prevenir las enfermedades de transmisión sexual en sus hijos, consulte con la urología pediátrica en Monterrey profesional del doctor David Fernández, llame ya a los números de nuestras dos sedes que encuentra en nuestra página web o escribanos al WhatsApp +52 812 466 6018.
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